La pandemia ha cambiado la forma de relacionarnos y de consumo. Los confinamientos absolutos impuestos en muchos países han obligado a la digitalización de gestiones profesionales y personales. Las grandes beneficiadas de esta situación han sido empresas como Instagram, Tik Tok, Facebook, Twitter, LinkedIn… Durante el año 2020, 1,3 millones de nuevos usuarios se unieron a las redes sociales cada día, es decir, 15 nuevos usuarios por segundo, según datos de Hootsuite. Concretamente, en España, un 80% de la población total está conectada a redes sociales. En el 2020 se sumaron 8,1 millones de españoles. Estas plataformas se han convertido en un canal para mantenerse en contacto con familiares, amigos, allegados… y también para alcanzar objetivos profesionales. Asimismo se han unido a las redes sociales empresas y marcas. Desde grandes compañías hasta pequeños comerciantes locales, han visto el potencial de estas herramientas para llegar hasta sus clientes. “Durante el inicio de la pandemia, las redes sociales se convirtieron en un punto de conexión y desahogo para los ciudadanos y para las empresas. Con todo cerrado a cal y canto, los usuarios y profesionales fueron más activos que nunca. Era como una válvula de escape en la que disfrutar y compartir. En ese