Calmar y restaurar la función barrera, claves en el cuidado de la piel sensible Bienestar 22 febrero, 2024 La piel sensible es un desafío que afecta a muchas personas, ya que reacciona de manera más intensa a factores tanto internos como externos. ¿Qué sucede realmente con una piel sensible? ¿Cómo podemos abordar sus cambios y proporcionarla el cuidado que necesita? Los expertos de Toskani, firma española de dermocosmética y medicina estética, apuestan por un abordaje global para una problemática que afecta cada vez a más personas. ¿Qué caracteriza a una piel sensible? Las pieles sensibles son más finas y claras, mostrando diferentes grados de rojez y, en ocasiones, descamación. La fragilidad capilar es la causa principal de esta sensibilidad, pudiendo derivar en condiciones como cuperosis o incluso episodios de rosácea. El origen suele estar vinculado a problemas circulatorios y una mayor densidad de los nervios cutáneos. Restablecer la función barrera Según explican desde Toskani, la tirantez, el calor, la quemazón o el ardor en la piel pueden ser provocados por diferentes causas: cambios medioambientales, estrés, falta de sueño… Para abordar estos cambios, es esencial actuar en sintonía con la tipología de piel sensible. Esto implica restablecer la barrera protectora, proporcionar hidratación, nutrientes y activos venotónicos. Tips para el cuidado de la piel sensible Prestar atención a la epigenética y adoptar hábitos de alimentación