La inteligencia artificial ha revolucionado numerosos sectores empresariales al simplificar tareas y mejorar los resultados de manera exponencial. Happy Scribe, una destacada startup especializada en tecnología de voz a texto, es un ejemplo claro de ello. Recientemente, han anunciado el lanzamiento de AI Assist, una función que integra ChatGPT en su plataforma de transcripción de audio. Esta integración ha permitido mejorar y optimizar los procesos de la empresa, aunque Marc Assens, cofundador de Happy Scribe, destaca que la intervención humana sigue siendo fundamental para garantizar la máxima precisión.

Hace dos años, Happy Scribe presentó su Mercado de Transcripción Humana, un servicio que asegura una precisión máxima en la transcripción gracias a la colaboración de transcriptores y traductores profesionales. “Nuestra combinación de tecnología avanzada y la experiencia de nuestro equipo nos permite ofrecer un servicio preciso sin comprometer la rapidez que nuestros clientes demandan”, explica Assens. Desde entonces, se han procesado más de 10.000 archivos en tres idiomas (español, francés e inglés). El equipo de transcriptores de Happy Scribe está compuesto por más de 1.000 personas de 70 países distintos, quienes forman parte de una comunidad internacional comprometida en ofrecer un servicio de transcripción que va más allá de la inteligencia artificial y los algoritmos. En un contexto en el que los servicios automatizados predominan, Happy Scribe destaca la importancia de construir comunidades humanas para garantizar los mejores resultados.

Es importante abordar la cuestión de los empleos en la “gig economy”, muchos de los cuales se consideran “ghost work” y consisten en trabajadores fantasma que realizan sus tareas desde casa, sin interacción con otros individuos y en largas jornadas laborales. Assens sostiene que este tipo de trabajo puede organizarse de manera ética y, para combatir estas situaciones, Happy Scribe ha creado una comunidad en la que los profesionales se conocen y colaboran entre sí. Al ser una startup sin inversores y sin la presión de aumentar los márgenes a expensas de los trabajadores, tienen la oportunidad de alejarse de un modelo en el que las empresas externalizan gran parte del trabajo y ejercen una enorme presión sobre los empleados para maximizar beneficios pagando menos por el trabajo realizado.

Happy Scribe, líder en tecnología de voz a texto

Happy Scribe fue fundada en Barcelona en 2017 por Marc Assens y André Bastié, y ha logrado destacarse como una de las principales startups internacionales en el campo de la tecnología de voz a texto. Su plataforma de transcripción de audio utiliza inteligencia artificial y algoritmos de aprendizaje automático para automatizar la transcripción, los subtítulos y la traducción en más de 80 idiomas y dialectos. Con una precisión que oscila entre el 85% y el 99%, Happy Scribe ha transcritos más de 150 millones de minutos de audio y cuenta con más de 5 millones de usuarios en todo el mundo.

Con una facturación de 5 millones de euros y un equipo de 20 personas, Happy Scribe ha automatizado la transcripción, los subtítulos y la traducción en más de 80 idiomas y dialectos utilizando inteligencia artificial avanzada y la colaboración de lingüistas profesionales. Su base de clientes incluye a reconocidas empresas y organizaciones como la BBC, el Parlament y la Generalitat de Catalunya, las Naciones Unidas, Forbes, Spotify, The Power MBA, Gomez-Acebo y Pombo, entre otros.

Happy Scribe ofrece dos servicios de transcripción: uno automático, con un costo de 20 céntimos por minuto, y otro profesional, por 2,24€, que cuenta con la experiencia de su equipo de transcriptores y está disponible para contratos por volumen.

Para obtener más información, visita el sitio web https://www.happyscribe.com/es.