partir del día uno de febrero, todos los patinetes eléctricos tienen prohibido el acceso a cualquier transporte público de Cataluña, con la excepción del AVE, durante al menos unos seis meses.

Esto ha sido un golpe fuerte para muchos usuarios de estos vehículos, ya que ahora van a tener que hacer cambios en la manera en la que se mueven, como nos cuentan en uno de los mejores talleres de patinetes eléctricos de Barcelona.

¿Cuál es la razón?

Las baterías de litio pueden llegar a ser peligrosas, como pudieron comprobar el pasado mes de noviembre en un vagón de tren de Ferrocarrils de la Generalitat, cuando la de un patinete eléctrico se sobrecalentó y provocó un incendio.

El fuego no acabó en tragedia gracias al maquinista, pero pese a su rápida intervención hubo varios heridos, lo que ha llevado a tomar esta decisión tan drástica, que parece ser que se revisará el 31 de julio con el ánimo de que no sea tan radical.

¿Cómo podemos evitar que la batería de nuestro patinete arda?

Siempre hay que tener en cuenta que la batería del patinete es peligrosa, por lo que hay que cuidarla lo máximo posible, siguiendo las instrucciones del fabricante sobre los ciclos de carga y descarga.

Además, evitaremos comprar accesorios no originales, como los cargadores de dudosa procedencia, cuya electrónica no es la mejor, de forma que pueden ocasionar que la batería se caliente demasiado.

Por supuesto, nunca hay que “trucar” el patinete, algo que se hace mucho puesto que suele ser muy sencillo e incluso se realiza con una app. Esto consigue que este vehículo eléctrico corra más, pero con el peligro de que las baterías se incendien.

Hay que hacerle mantenimiento como a cualquier vehículo

Un error muy común es pensar que el patinete no requiere de mantenimiento al ser un vehículo eléctrico, pero lo cierto es que sí lo necesita como una moto o un coche.

Aquí, lo principal es tener en buen estado la batería y el propio usuario puede hacer una inspección visual de la zona, buscando sobre todo abultamientos de esta, fisuras en la caja, etc. Así, ante la más mínima señal llevaremos el patinete a un taller especializado.

A su vez, y aunque no haya signos de problemas, cada pocos meses conviene que un especialista testee el estado de la batería, por si hubiese algún signo de deterioro que aún no hemos visto.

No hay que olvidar que las ruedas también hay que cambiarlas, que los discos y las pastillas se sustituyen y que como un vehículo que puede circular a 25 km/h conviene que todas las uniones (en especial en las partes en las que se pliega) sean firmes.

Las luces son otro de los puntos en los que hay que incidir si circulamos de noche o al amanecer, ya que servirán tanto para ver como para ser vistos por otros usuarios de la vía, en especial los coches, motos o autobuses, que van a velocidades superiores a la nuestra.